Muchos vehículos están parados, esperando a que pase la cuarentena para volver a encender sus motores. Pero otros siguen en marcha a pesar del confinamiento. Son los de los trabajadores que los utilizan para sus desplazamientos laborales. También los de quienes van a comprar alimentos, visitan a alguna persona dependiente o acuden al hospital o centro de salud.
Los habitáculos de todos estos vehículos, como cualquier otro espacio pequeño y cerrado, pueden convertirse en estos días en un foco de infección del COVID-19 si no se toman las medidas higiénicas adecuadas.
Especial precaución deben tomar aquellos conductores que durante estos días realizan algún desplazamiento que pudiera considerarse de riesgo, como el traslado de alguna persona con síntomas. También los que van a utilizar un coche que han conducido otras personas. Pero ¿Cómo desinfectar nuestro coche?
En todos estos casos lo mejor es desinfectar a fondo elementos como volante, palanca de cambios, salpicadero, cinturón de seguridad o tiradores de las puertas.
Los productos de limpieza utilizados en casa pueden resultar demasiado agresivos para algunos elementos de nuestro coche. Aunque lo recomendable es que los utilizados contengan, al menos, un 70% de alcohol para garantizar la plena desinfección.
Para los elementos más delicados, como los asientos, puede emplearse agua y jabón. En algunos casos se puede recurrir también el alcohol aunque con moderación ya que puede ocasionar daños en las tapicerías.
La ventilación es otro aspecto a tener en cuenta. Algunos estudios afirman que el coronavirus puede sobrevivir en las partículas de aire hasta tres horas por lo que es necesario la correcta ventilación del coche y la limpieza de las rejillas del aire acondicionado.
Al bajar y volver a subir al vehículo, por ejemplo para repostar, se recomienda el uso de guantes. De no disponer de ellos lo aconsejable es utilizar gel desinfectante una vez en el coche.
Hace solo unos días, el gobierno de España modificó la norma que regula la movilidad durante la cuarentena para recalcar que se permite circular a los vehículos en los que viajen dos personas, en casos de desplazamientos justificados, y siempre y cuando el viajero se sitúe en los asientos traseros del vehículo. Cualquier precaución es poca.
